Una Tregua: Jardín Frenético

No hay dudas, Árbol ya se ha consolidado como una de las mejores bandas de rock nacional. Se formó a fines de 1994, en Haedo (Zona oeste de Buenos Aires). Sus integrantes Eduardo Schmidth (voz, violín, charango, flauta y trompeta), Pablo Romero (percusión, guitarra y voz), Martín Millán (batería), Hernán Bruckner (guitarra), Sebastián Bianchini (bajo). En 1996 registran en forma totalmente independiente su primera producción discográfica "Jardín Frenético". A través del grupo mexicano Café Tacuba llega una copia de este disco a Gustavo Santaolalla ("El gurú", exlíder de la banda de rock folklórico Arco Iris, actualmente convertido en uno de los productores más importantes del rock para mi un verdadero rey Midas) , quien los convoca para firmar contrato con Surco. Allí editaron el primer disco "Arbol" (1999). Fue elegida como banda revelación de 1999 por los lectores del Suplemento Si del diario Clarín y por la prestigiosa Revista Rolling Stone (edición sudamericana). A fines del 2001 lanzan "Chapusong's", placa que los lleva a tener mayor disfusión y sin dudas mi disco favorito.

Decía Pagina 12 en una entrevista a la banda en el 2002:

Chapusong’s es sofisticado, vital y atrevido (prestar especial atención a “La vida” y “Cascaramascara”). Hay para todos los gustos: grunge en “De arriba, de abajo”, fina orquesta en “Esperar”, balada folk en “Ya lo sabemos”, hip-hop, cuartetazo deforme y ska, todo con deliciosos aderezos de folklore autóctono. La voz de Schmidt brinda una sensación de homogeneidad que la música parece a punto de romper todo el tiempo. Le canta al amor y al engaño, entre otras cosas. “Nos animamos a hablar de amor, porque nos dimos cuenta de que, pese a la problemática social que se vive, por ahí sufrís más si te deja una mina que si te quedás sin laburo. A veces vale expresar que no te bancás a tu mujer y que te vas a tomar un helado con otra chica en la esquina”, opina Eduardo. Martín, el baterista, agrega que “son letras sociales vistas desde un costado más afectivo; pensamos que esto es menos distorsionante que hablar de la gente que no tiene trabajo, mientras vos estás laburando. Resulta más creíble”.

Tuve la oportunidad de escuchar el año pasado a esta banda en Sion (una disco tipo Cromagnon en Mendoza, me imagino que después de todo lo sucedido a fines de año debe estar cerrada) y si bien me parecía (si, solo parecía) al abuelito de Heidi (tiene algún nombre???, creo que siempre fue el abuelito) disfrute del recital con muchas energías (si, salté más que Heidi, Pedro y las ovejas). Y me quedé con ganas de más!

En el 2004 sacan "Guau" considerado uno de los mejores álbumes de ese año en materia de rock. Personalmente prefiero Chapusong, si bien en este disco no pierden la ironía para decir cosas importantes y seguir comprometidos con la realidad social (sobretodo en ese tono infantil que les dá una cuota más de sarcasmo). Sin dudas ningún tema es igual al tema que sigue, no es una banda soporífera ni reiterativa en un mismo estílo, la variedad de instrumento es muy amplia y la voz impecable. La producción se hace notar, aunque en eso prefiero la crudeza de Chapusong, dá la sensación de que la banda pierde cierta transparencia.

Todavía no hay fecha de un recital en Mendoza. Pero pueden seguir la agenda de Arbol en: